viernes, 8 de agosto de 2014

Olvidada

Ella se sentó en el pasto.
Estaba sola.
Ella gritó.
Ella luchó.
Pero nadie la oyó.

Ella tenía la mirada sombría.
Ella sonreía cruelmente.
Ella lloraba, derrotada.

Ella dejó de ser fuerte.
Ella dejó de luchar.
Ella dejó escapar las lágrimas,
sumida en la oscuridad.